Cuando te decides a fermentar, elegir el té adecuado para la kombucha es un paso muy importante. No es algo que se puedas ignorar sin más, ya que afecta enormemente al sabor final.
Puedes preparar sólo una pequeña cantidad de té para kombucha y luego diluirlo con agua. Así también se enfriará más rápido.
En primer lugar, deberías utilizar hojas de té reales, que se derivan de una planta de té llamada Camellia synesis. Las hojas y los brotes de esta planta se utilizan para producir té negro, verde, oolong y blanco. Esas hojas de té están llenas de componentes beneficiosos que son necesarios para el crecimiento del SCOBY y el éxito de la fermentación.
En segundo lugar, las hojas de té deberían proceder de cultivos ecológicos. El té normal puede estar cubierto de productos químicos y pesticidas nocivos, que se liberarán en el agua caliente al preparar el té para la kombucha. Esto puede inhibir el crecimiento del SCOBY. El consumo de kombucha también puede ser potencialmente peligroso.
Negro, verde u oolong, ¿cómo elegir correctamente?
TÉ NEGRO
Se considera el mejor té para el kombucha, especialmente para los principiantes. Estas hojas de té están totalmente oxidadas, por lo que el té negro tiene un sabor más fuerte y contiene la mayoría de los nutrientes necesarios para el crecimiento del SCOBY y los procesos de fermentación. También proporciona las mejores condiciones de la elaboración y un pH más constante. La kombucha de té negro tiene un sabor rico y acaramelado, similar al de la sidra.
Hay varias variedades de té negro. Los tipos más comunes que funcionan mejor para el kombucha son el Ceilán y el Darjeeling. Según nuestra experiencia, el té negro Darjeeling da los mejores resultados. Las hojas de té tienen un aroma floral que es distintivo y vivo. El color del té preparado es claro y transparente. Debido a su frescura, color y suave dulzura, los tés del primer brote suelen ser más lujosos que los demás.
Té negro Darjeeling
TÉ VERDE
Está mínimamente oxidado y tiene un sabor más suave que el té negro. La kombucha tiene un sabor fresco, cítrico y ligeramente afrutado.
Nuestra selección de té verde procede del primer brote de Sencha. Se cosecha en primavera, por lo que tiene un mayor contenido de teína y muchos antioxidantes. El primer brote de Sencha recogido en primavera también se considera la versión más deliciosa y fina del té. El té terminado tiene un color verde amarillento y un sabor herbáceo, dulce y ligeramente astringente. Es una mezcla perfecta entre amargo y dulce.
Té verde Sencha
TÉ BLANCO
Obtenido a partir de hojas de té cocidas, secadas y mínimamente oxidadas. La kombucha elaborada con té blanco tiene un sabor floral y delicado con un ligero aroma a vainilla y rosas.
No se recomienda para el periodo de activación ni para los primeros lotes de kombucha. Contiene mucha menos cafeína y taninos que el té negro. Por lo tanto, no ofrece las condiciones ideales para el crecimiento del SCOBY. Más adelante, cuando el cultivo sea lo suficientemente fuerte, puede utilizarse en combinación con té negro u oolong.
Té blanco
TÉ OOLONG
Al igual que el té blanco, el oolong está parcialmente oxidado. La kombucha que se obtiene tiene un sabor más suave, fresco y afrutado
Té Oolong
¿Y las infusiones para kombucha?
MELISA
La mayoría de las infusiones no pueden utilizarse como té para la kombucha debido a la falta de algunos compuestos de nitrógeno que son necesarios para el crecimiento del SCOBY. Sin embargo, la melisa puede utilizarse eficazmente como fuente de nitrógeno para la fermentación de la kombucha.
El uso de melisa para la fermentación de la kombucha puede dar lugar a una bebida con mejores características funcionales en comparación con la preparada con té negro. La kombucha de melisa tiene importantes actividades antioxidantes y antimicrobianas.
HIBISCO
Aunque la mayoría de las infusiones no son apropiadas para la fermentación, no es el caso del hibisco. La kombucha elaborada usándolo tiene un sabor agrio y floral. También tiene un alto contenido en antioxidantes. Es posible hacer kombucha de hibisco en la primera o segunda fermentación.
Primera fermentación: igual que con el té negro, sólo que sustituimos el negro por la infusión de hibisco.
Segunda fermentación: añadir el hibisco y la kombucha en botes herméticos, y fermentar de 3 a 5 días, hasta que alcance la carbonatación deseada. Funciona increíblemente junto con la rosa mosqueta.
MENTA
Generalmente no se recomienda elaborarlo con infusión de menta, debido al alto contenido de aceites esenciales. Estos pueden dañar el cultivo de kombucha y favorecer la aparición de moho. Sin embargo, es posible utilizar este té para kombucha cuando se mezcla con té negro y verde para proporcionar cafeína y taninos para mantener saludable el SCOBY, y promover la proporción adecuada de levadura y bacterias en la infusión. Te recomendamos que utilices 2 partes de mezcla de té negro y verde, y una parte de té de menta. Asegúrate de usar té de menta de verdad.
Té de menta
Espero que este artículo te ayude a elegir el té adecuado para la kombucha o a experimentar con algo nuevo.
